2019 fue un año en que aprendí a convivir en dos escenarios dramáticamente diferentes, el campo y la ciudad.
Al editar esta publicación me doy cuenta cuan polifacético ha sido el año:
Pertenecer a un colectivo social
Cierro este año albergando un profundo sentimiento de gratitud y sintiendo que se ha hecho muy bien la tarea. También debo admitir que ha sido uno de los años mas difíciles en el plano económico y que la escaeces me ha enseñado a ser creativo y a confiar en las capacidades que ha desarrollado la unidad familia y las comunidades de que participo.
Esta bitácora se ha generado casi automáticamente al guardar un par de fotos mensuales en un pequeño archivo.
Iniciamos el año escuchando a los compañeros de la colectividad (centro Psique), buscando estrategias para articular sus propios proyectos y compartiendo los proyectos que ya vienen marchando desde hace 3 años: El consultorio popular de psicología, la casa taller de arte, El proyecto ECOS (exposiciones contra el olvido y el silencio), y otros tantos más.
Participar activamente en la formación de psicólogos
Para mediados de enero, se logro la activación del café cultural que reemplazaría la recepción de la oficina principal de la casa taller. conferencias, charlas y talleres para la comunidad fueron un gran aporte a los procesos que se vienen configurando allí.
Involucrarnos en procesos de educación popular
En febrero se activo un nuevo espacio para el consultorio popular en un espacio rural y mi compañera de vida (Marcela) re-activo espacios de formación con los niños y niñas del territorio.
Tremenda bruja y maravillosa maestra.
Me siento especialmente agradecido aquí con Sara Jaramillo y con la Fundación Educativa soleira por involucrarse en dicho proyecto.
Compartir la experiencia con un gran campo de profesionales
Se activaron también los procesos de formación sobre terapia de juego y diversas estrategias para la exploración del inconsciente y el reconocimiento de las dinámicas psíquicas que operan como los ladrillos psíquicos de nuestra existencia. Éstos espacios se generaron en diversos lugares: en centro psique, en otros centros terapéuticos, en fundaciones sin animo de lucro y en sectores populares que tienen inquietudes sobre lo psicoterapéutico.
Crear espacios para la vida cultural
al ser parte de la colectividad, centro psique, hemos aprendido a gestar espacios en el territorio para el desarrollo humano y albergar la pregunta por la participación territorial. quizás una de las preguntas mas necesarias en la actual crisis de legitimidad que atraviesa nuestro país. ha sido sorprendente encontrarnos con cientos de personas axfisiados por el monotelismo del mercado que están buscando estrategias para recuperar la esperanza que la vieja política tanto ha deteriorado.
"Necesitamos mantener viva la pregunta por la utopía"
Psicología crítica
Tengo muchos amigos que son profes de psicología, éste año invitamos a sus estudiantes y participamos en espacios de debate sobre la importancia de ser más coherente en la atención psicológica en los diferentes escenarios que desempeñamos nuestros servicios profesionales.
revisando mi agenda, me doy cuenta de que tuve la ocasión de reunirme con 19 grupos diferentes de profesionales en formación.
de los apuntes que se han generado en estos espacios surge el nuevo curso denominado "Debates en la atención psicológica Contemporánea"
Aprendimos así a cuestionar a la psicología y sus agentes sobre la coherencia de su ejercicio en nuestros territorios.
Atención psicológica popular
La respuesta al hastío que nos genera el monotelismo de mercado y el apocalipsis ecológico a que apunta el hiperconsumo capitalista fue desarrollar acciones que no tuviesen cobro alguno y a las que se pudieran vincular personas que no tienen posibilidad de pago. Así surgió el voluntariado social de centro psique que cumple ya 3 años.
Este año se generaron 12 encuentros que arte terapéuticos con vinculación directa de la comunidad y tuve la oportunidad de acompañar a 17 personas en terapia individual en el consultorio popular.
Vinculación a redes de acción popular.
La esperanza fluye con vitalidad renovada en los sectores populares: Frijolada, canelazo, marcha, cacerolazo, muralismo, huertas comunitarias, tejido de experiencias, espacios de debate, co-formación y democratización del conocimiento, circulos de palabra. Seguiremos buscando espacios para vincularnos al movimiento que da esperanza a américa latina, pese a que el tiempo se hace escaso para vincularnos a tantas cosas.
Reconocimiento de nuestros territorios y sus dinámicas.
Desde el cuerpo, en las relaciones y con el espacio habitado, el camino me ha conducido de buena manera para preguntarnos por la coherencia de nuestras acciones. y la pregunta por el alma ha generado un nuevo enfoque en la mirada y allí la posibilidad de crear un nuevo mundo al verlo de formas nuevas.
En la Imagen, mi hija Alma representando el territorio que hay al rededor de su cuerpo, las cosas que tienen sentido para ella a los 4 años.
Jóvenes y adolescentes.
También se me ha dado la ocasión de trabajar conjuntamente con grupos de jóvenes y adolescentes que buscan en el arte, un dispositivo para que sus almas expresen lo que sentipiensan, lo que les preocupa, lo que les genera tensión y conflicto psíquico y lo que quieren proponer al mundo.
en la imagen, un grupo de chicas de la comunidad en la casa de la cultura alcázares.
Proceso curatorial del proyecto Ecos
(Exposiciones contra el olvido y el silencio)
Este año se me brindo la oportunidad de configurar las exposiciones de PECOS y experimentamos allí una serie de reflexiones sobre la nuestra vida, el cosmos, la territorialidad, el des arraigo, la mirada mágica y otras tantas cosas que siento necesitamos difundir de mejor manera.
Laboratorio pedagógico.
Es un espacio que se genera en centro psique para preguntarnos sobre diferentes alternativas pedagógicas, la propuesta opera como un circulo de conversación con diferentes agentes educativos que vienen protagonizando la emergencia de alternativas pedagógicas en el mundo contemporáneo. por asuntos de agenda, estará cerrado en 2020-1 y retomaremos en el segundo semestre del año.
Lideres territoriales.
He tenido la ocasión de conocer a los lideres sociales del territorio en que habito y crear estrategias de trabajo colaborativo. el asunto gatea pero pronto estará marchando a mejor ritmo.
Resolución de conflictos y mediación escolar.
También he tenido la ocasión de fortalecer y recuperar mis conocimientos en asuntos relacionados con la mediación/resolución de conflictos en entornos educativos gracias a las invitaciones realizadas por varias instituciones educativas con las que vengo trabajando desde hace un par de años.
Comunidad e aprendizaje para la crianza consciente.
El colegio Soleira le aposto a la conformación de una comunidad de aprendizaje para la formación de familias conscientes que inició actividades en el segundo semestre de 2019 y trabajamos temas complicados como la mediación tecnológica, la disciplina, el lenguaje de las pataletas y muchos otros temas que ahora enriquecen nuestra capacidad de manejo de muchas situaciones.
Construcción de cajas de Arena
Este año hicimos casi 20 cajas de arena que serán utilizadas en diferentes ambientes, educativos y terapéuticos. La aplicación de nuevas tecnologías y el diseño para la impresión 3d nos han permitido ser mucho mas polifacéticos en este campo.
Paternidad
Quizás lo mas maravilloso de este año fue disponer más y mejor tiempo para compartir con mis dos hijos. Ver sus logros y luchas, escuchar sus anécdotas y acompañarlos a construir sus sueños. Estuvo dificil el tema de salud, tuvimos varias momentos de hospitalización e incapacidades largas pero todo se pudo resolver de la mejor manera posible. También las cosas difíciles no han generado muchos aprendizajes, sobre los riesgos de los viajes, sobre lo complicado de las intervenciones quirúrgicas y la lucha por nuestros derechos en el actual sistema de salud (privatizado y con enfoque mercantil)
Muchos viajes
También fue un año de muchos y maravilloso viajes para estar tan lejos y tan cerca como dispusiera el corazón, para perdernos y para encontrarnos y para compartir con viejos y nuevos amigos que siempre hay motivos para ser feliz.
Mis padres.
2019 nos dio la posibilidad de extrañarnos y de disfrutar los pocos momentos que pudimos compartir. Irme a vivir fuera de la ciudad activo en mi madre un sentimiento de nostalgia que fortaleció muchísimo nuestra relación. nuestros ancestros fueron agricultores y la relación que tenemos con la tierra ha sido deteriorada por el devenir historio de nuestro país, oleadas de migración masiva y muchas otras cosas de las que no tengo ganas de hablar hoy. el hecho es que este año he podido amar mas a mis padres.
2019 inició con 20 metas ecológicas en mi agenda, ambiciosa la causa. Ello me ha obligado a generar un movimiento profundo en muchas de mis practicas cotidianas.
Me he propuesto agradecer por cada una de las cosas que recibo, ser el guardián de los objetos que llegan a mi, dejar ir muchas de las cosas que no tienen un uno cotidiano en mi vida, hacerme responsable directo de mis desechos (esta es la mas dificil).
El encuentro cotidiano con la naturaleza e el estudio de muchos de los escritores que hablan sobre la ecología profunda ha llenado mi vida de una serie de sentimientos de comunión y conexión que no estoy seguro de haber experimentado antes.
Hoy me reconozco guardián del mundo que habito y me pregunto por los derechos del río y del bosque.
En la foto, estoy aprendiendo a hacer selfies (otro de mis pequeños logros de 2019), en un majestuoso bosque lleno de musgo y milenarios tardigrados (nuestros ancestros).
Ahora doy gracias y me reconozco portador de la vida que han preservado mis ancestros humanos y no humanos. - Biofílico -
Guiado pro mi compañera e inspirado por muchos amigos, éste año dimos un giro de 180 grados y nos orientamos a la alimentación orgánica. A la auto gestión alimentaria y a la pregunta por la soberanía alimentaria. - cosa dificil en principio.
inicialmente, fue buscar mercados campesinos y tiendas orgánicas que llevan rato largo caminando en esos temas.
luego activamos una huerta de maseteros en nuestro balcón, para ir progresivamente conquistando nuevos y mejores espacios.
Una vez tomamos la decisión de hacer pequeños cambios, el mundo se abrió ante nosotros y fuimos estableciendo vínculos con campesinos y otras personas que tienen las mismas intenciones que nosotros. El camino apenas comienza pero los resultados sobre nuestra salud ha sido maravilloso... los niños preguntan si ya esta el queso de lucero o la leche y mantequilla de la vaca fortuna (de nuestro vecino).
El camino fue tomando mas coherencia en nuestra cotidianidad y poco a poco estaba en cada una de nuestras acciones cotidianas, como el trabajo comunitario, los talleres con niños, niñas y adolescentes y las reuniones de diferentes redes de trabajo comunitario.
En la foto esta Alejo, compañero y amigo, disponiendo el alimento en un grupo de formación artística con jóvenes de la comuna 13 de medellín. muchas cosas se han hecho y el camino apenas inicia.
El perro, compañero y guardián
Quizás el más beneficiado de todo este enfoque ecológico es Haplo, un compañero de viaje que llego a nuestras vidas en 2014 muy maltratado y enfermo. fue educado para ser acompañante terapéutico y estuvo hasta el 2018 acompañando niños con autismo. ahora Haplo es el compañero cotidiano de mis hijos y el mejor guía que cualquier persona pueda necesitar si va a hacer excursionismo, montañismo y senderismo.
Retorno a la tierra.
Por estas pequeñas cosas y muchas más que no quedaron registradas en fotografiaras (como los espacios de compartir entre amigos) Cierro este año lleno de gratitud y con muchas ganas de que vengan mas años como este.
Gracias 2019 y gracias a todos ustedes poro estar allí.
Gracias por sus preguntas, mensajes y correos.
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